Ha faltado muy poco, pero esta vez tampoco ha podido ser.

Bizkaia y Gipuzkoa 1 jugaron la final del III Campeonato de Euskal Herria de Bote Luzea, el 1 de noviembre, en Oiartzun. El pasado 6 de octubre dicha final tuvo que suspenderse por la lluvia. Y esta vez, aunque también mirando continuamente al cielo, se pudo disputar al completo. Además, fue un encuentro muy ajustado y de mucha emoción. Los gipuzkoarras comenzaron 0-1 (así estaba el marcador cuando se suspendió el encuentro), pero al final la txapela fue para los bizkaitarras.

1 de noviembre, jueves, 16:00, Oiartzun-Beheko Plaza

BIZKAIA 5 vs GIPUZKOA BAT 4

Gipuzkoa se adelantó 0-3, y después 1-4. Pero Bizkaia rompió la buena racha de los gipuzkoarras, y empató a 4 en el último segundo del partido (que tiene una duración de 75 minutos). Así, ambos equipos tuvieron que disputar la prórroga.

En la prórroga, Gipuzkoa volvió a adelantarse 0-30. Pero de nuevo Bizkaia consiguió dar la vuelta al marcador y ganar 5-4, llevándose así la txapela del campeonato.

Gipuzkoa ha disputado las finales de todas las ediciones, pero todavía no ha conseguido llevarse ninguna txapela: en la primera edición Gipuzkoa 2 perdió contra Lapurdi 1, en la segunda Gipuzkoa 2 contra Bizkaia, y esta vez Gipuzkoa 1 otra vez contra Bizkaia. Habrá que seguir intentándolo.

Los siguientes pelotaris han integrado el equipo Gipuzkoa 1: Unai Alvarez, Beñat Arzelus, Julen Chiapuso, Iñaki Esnal, Julen Iribar, Iban Jauregi, Ekaitz Lasa y Andoni Zabala.

En el III Campeonato de Euskal Herria de Bote Luzea han competido en total ocho equipos, repartidos en dos grupos: Bizkaia, Gipuzkoa 1, Iparralde 2 (Sara) e Iparralde 3 (Itxasu) en el grupo A, y Gipuzkoa 2, Iparralde 1 (Senpere), Iparralde 4 (Donapaleu) y Nafarroa en el grupo B.

El organizador de la tercera edición ha sido el club de pelota Txost de Oiartzun, uno de los promotores de la recuperación de los juegos directos de pelota en Euskal Herria.

El  Bote Luzea es la modalidad directa más antigua de pelota de Europa y Euskal Herria, origen y fundamento de todas las modalidades de pelota que se han practicado posteriormente. Desaparecida en Euskal Herria a partir de la guerra civil, está viviendo un progresivo proceso de recuperación en los últimos años.

Los dos equipos se sitúan uno frente al otro y no se juega golpeando la pelota contra la pared. Cada equipo está formado por 8 jugadores, de los cuales compiten 5; pero los cambios durante el partido están permitidos. Se practica en recintos de unos 60 metros de longitud, normalmente plazas abiertas, y el objetivo consiste en ganar terreno al contrincante. 

En la sección Galerías de fotos de esta página web pueden verse varias imágenes de la final, y también de otros partidos del campeonato.